críticas gratuitas
es un fenómeno propio de las grandes ciudades, y cuando vivía en Bilbao me gustaba y me desagradaba por un igual. aquí en Aix me está pasando lo mismo. me refiero a la prensa gratuita. por un lado, es un placer poder renovar lecturas casi a diario. pero por otro, no hago más que pensar en los árboles, en el papel, y en los kilos de basura por habitante. más cuando aquí en Aix es más difícil encontrar un cubo de reciclaje que una pescadería (aún estoy buscando cualquiera de ellos).
este problema de la prensa gratituta lo podría evitar rechazando lo que se me ofrece y dejando en su sitio lo que veo por ahí. pero ese es el quid de la cuestión, que mi instinto de lectora voraz me dirige hacia el papel como las moscas van a ...
esta tarde he ido hasta la oficina de Turismo -la meca de este tipo de prensa- a comprar el bono bus semanal; he vuelto con un par de publicaciones nuevas: una se llama Ventilo, su formato es el de un períodico, y lo publica la asociación Aspiro de Marsella (http://www.journalventilo.net/); y la otra se llama Zibeline, y es un mensual gratuito de papel prensa y tamaño ABC que, como dice en la portada que sale cada cuatro jueves, y este corresponde al período que va del 20 de marzo al 24 de abril, acabo de enterarme en qué día cae mi 32 cumpleaños.
he estado hojeando (sí, pasando hojas) Ventilo mientras me comía unas galletas chococerise (génoises nappées à la cerise et recouvertes de chocolat blanc décoré) que no son para tanta retórica.
y hete aquí que me encuentro con una terrible crítica de la película de Alex de la Iglesia, Los crímenes de Oxford, a la que preceden algunos párrafos reveladores de francófona ignorancia.
el firmante se llama Henri Seard, y titula su pieza "Branlette espagnole", sin duda haciendo referencia a los altos y bajos de la peli de Alex, que los tiene.
empieza con una pregunta retórica: le cinéma espagnol, est-il surestimé ou, plus prosaïquement, fait-il chier? y sigamos, porque para el galo el cine español es: l´institutionel Almodovar et quelques disciples barrés -Bigas Luna (Jambon, jambon) ou Julio Medem (Lucía y el sexo); la nouvelle génération du cinéma ibérique nous les brise menu. D´Amenabar (et ses pretentieux Tesis, Ouvre les yeux) à Del Toro (et son barnum mystico-horrifique, Labyrinthe de Pan, L´échine du diable) en passant par De la Iglesia qui bouffe à tous les râteliers (pour un Crime farpait délirant, combien de croûtes?), le constat est pour le moins déceptif.
bueno, hasta aquí supongo que os habrá llamado la atención, al menos, la lista de discípulos de Almodóvar. creo que, en el caso de Amenábar, es imperdonable que olvide Los otros y Mar adentro, como lo es que reduzca la filmografía de Medem a Lucía y el sexo. Luna no es santo de mi devoción, pero lo de discípulo de Almodóvar me parece una falta de respeto a sus canas.
y a continuación, ataca Los crímenes de Oxford:
-el escenógrafo, Jorge Guerricaechevarría, debío de escribir "imbibé de cerveza".
-la película es pomposa (con planos secuencia inconsistentes), molesta (llena de homenajes a Hitchcock, El hombre que sabía demasiado), y al final ridícula (hay más culpables potenciales y pistas que un episodio de Scoby Doo (Scoubidou, en la lengua de Rimbaud).
habrá, dice nuestro analítico francés, gente que salga entusiasmada de la película, seguramente fans del Cluedo, de Eurovisión, de las Historias extraordinarias de Pierre Bellemare o lectores de la revista Nuevo Detective. los que no, se irán a ver Un cadáver a los postres de Robert Moore, de 1976, una película difícil de superar.
pues nada, así se ventilan en el período gratuito Ventilo el cine español y la película de Alex de la Iglesia. con críticas igualmente gratuitas.