jet lag
son las dos de la morning, pero mi reloj biológico porteño dice que son las 9 y que aún quiere marcha...
estoy escuchando a los Stooges. estoy hecha una sentimental...
el vuelo ha sido un coñazo, sobre todo el aterrizaje... casi escupo el intestino delgado (sobre la única señora que aplaudió al piloto, ¿su madre?).
Julieta, finalmente, hice la mejor de las artimañas para poder quedarme: pensé durante un mes que salíamos a las 22:30, y la hora del vuelo era las 21:10. es decir, que nos sobraron 15 minutos para comprar alfajores Havanna... ¡no me lo podía creer!!! q inconsciente más consciente tengo...
estoy a 10 mil kilómetros de Buenos Aires. soy incapaz de dormir aunque anoche no pegué ojo. lo mejor del vuelo, q he visto el norte de África, Gibraltar y el sur de la península desde el avión mientras esperaba en la tediosa cola del baño y he flipado un rato. lo demás, ha sido más de lo mismo y vuelta a casa.
me imagino que volveré a las canciones: la última tarde en BA, la de ayer, escuché con Julieta una versión del Enjoy the silence de Depeche Mode por Tori Amos. impresionante.
acabo de resucitar mi móvil hace un rato y no me quiere decir quién me ha llamado este último mes. ni un sólo sms. qué sentido tiene saber si no llamó nadie o si no registró nada por haber estado fuera de aquí? ya, ninguno.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home