un día cualquiera

esta mañana me despertó mi madre por teléfono. a mí y a Julieta, que dormíamos nuestra quinta hora de sueño. anoche estuvimos hasta las 4 en el Sham Rock...
por la mañana estuvimos en el cementerio de la Recoleta, que está a cuatro patadas de mi departamento. haciendo fotos. he hecho algo tan kitsch como fotografiarme en el panteón de Evita. Julieta no quiso, normal. yo iba a hacer lo propio en el de Bioy Casares pero no hubo forma de encontrarlo. por contra, encontramos por casualidad el de Lorenzo Leveratto, el bisabuelo de Juli. y eso que ella paseaba repitiéndo una y otra vez que no lo íbamos a encontrar. hemos prometido volver...
a mediodía hemos estado un par de horitas en posición horizontal, viendo una rinoplastia en la I tv.
por la tarde Julieta se fue a Filo, a clase. a Puán. a la facu. a ese lugar tan cubano...
y yo... al Alto Palermo. con Adri.
nos hemos cenado un bife de chorizo que te morís. y un helado de Freddo de banana split y dulce de leche, con chocolate... mmmm.
y ahora, un ratito de red antes de sentarme frente al portátil a preparar mi charla de mañana en el Instituto de Antropología.
me he comprado el disco de Queens of the Stone Age por 6 euros.
y es un milagro que mi tarjeta de crédito conserve casi intacta su integridad.